5 de diciembre de 2010

LA MIRADA HOY NO ES ALEGRE

Ale llegó serio del instituto, su cara mostraba cierto cansancio aunque esas ojeras, esa mirada y esos ojazos tristes delataban que algo había ocurrido. El origen no hacía falta que me lo explicara, sabía qué le había pasado, lo sabía desde el momento que días atrás me dijo que quería invitar a su cumpleaños a 12 compañeros de clase.

Cuando salimos de mi trabajo le pregunté que le habían dicho los compañeros, Ale no encontraba los signos para explicarme lo ocurrido. Cuatro le habían dicho que si, pero del resto no conseguía explicarme que habían dicho, después de un pedazo de rato que me pareció interminable, me dijo que algunos ni siquiera le habían cogido la invitación, esto acompañado de una expresión que me conmovió.

Llegamos a casa, comió y se acostó, normalmente me dice que lo acompañe para arroparlo y darle un beso pero desapareció por el pasillo sin decir nada. Cuatro horas después asomó con una cara ensombrecida y me preguntó si habían llamado para confirmar la asistencia al cumpleaños, le dije que no, se quedó sentado junto a mi serio y con la mirada perdida. Me invadió una profunda tristeza,.
Después a solas me caían las lágrimas, me sentí muy dolorida quizá extremadamente.
Los cambios hormonales están haciendo estragos en mi estado anímico y en la capacidad de gestionar la interpretación de la realidad.

La inclusión educativa no genera relaciones sociales naturales.
Tenemos a los adolescentes reunidos por tipo de diversidad, fuera del ámbito escolar (y dentro también) no todos se relacionan con todos, salvo excepciones de chavales con diversidad física el resto se relaciona con iguales en diversidad, sobre esto nada tengo que decir hoy porque la hormona cabrona anda merodeando en mi ánimo y bastante tarea me viene dando estos días como para darle hoy vuelos.

11 comentarios:

Carolina García Gómez dijo...

Lo siento mucho, en verdad no hay que tener una discapacidad para que los niños sean crueles entre ellos mismos... Yo era gorda en mi infancia y eso bastó para sentirme relegada, ahora imagínate con nuestros hijos. Mucho ánimo y hay que seguir en la lucha. Así como existen niños que no se relacionan con otros niños con discapacidad, hay quienes sí. Ha seguir educando y sensibilizando. Abrazos.

Carolina García Gómez dijo...

Lo siento mucho, en verdad no hay que tener una discapacidad para que los niños sean crueles entre ellos mismos... Yo era gorda en mi infancia y eso bastó para sentirme relegada, ahora imagínate con nuestros hijos. Mucho ánimo y hay que seguir en la lucha. Así como existen niños que no se relacionan con otros niños con discapacidad, hay quienes sí. Ha seguir educando y sensibilizando. Abrazos.

maria dijo...

HOLA CARMEN ENTIENDO MUY BIEN LO QUE HE LEIDO DEL CUMPLEAÑOS DE TU NIÑO,YO TENGO UNA NIÑA CON SINDROME,Y PASADO POR ACOSO ESCOLAR,DIAGNOSTICADO,LA VERDAD QUE HE LUCHADO MUCHISIMO Y ESA TRISTEZA QUE TU SIENTES YO LA LLEVO CONMIGO,HACE YA 16 AÑOS,LOS NIÑOS SON MUY CRUELES,PERO LOS MAYORES LOS ON MAS AUN,LOS PADRES Y MADRES DE LOS NIÑOS TENEMOS QUE MOLESTARNOS UN POQUITO Y EXPLICARLES A SUS HIJOS QUE EN LA VIDA HAY PERSONAS CON ALGUNOS LIMITES,SEA CUAL SEA SU PROBLEMA,YO ESO LO HE ECHO CON MI NIÑA,Y SOY UNA MADRE JOVEN SOLO TENGO 38 AÑOS,YO ME PREGUNTO,¿PORQUE NO EDUCAMOS Y ENSEÑAMOS A LOS NIÑ@S A QUE TODOS SOMOS IGUALES Y QUE HAY QUE RESPETARSE MUTUAMENTE?,PORQUE SI YO LO HE CHO CON MI NIÑA,LOS DEMAS TAMBIEN PUEDEN.LA VERDAD ES QUE LEER ESTO ME INDIGNA PORQUE LO HE VIVIDO,Y SIGO VIVIENDO,PERO AQUI ESTOY,Y LE PIDO A DIOS TODOS LOS DIAS QUE ME SALUD PARA PODER SEGUIR LUCHANDO Y CONSEGUIR,QUE NADIE SEA RECHAZADO.SI NECESITAS ALGO AQUI ME TIENES Y SI NECESITAS DESAHOGARTE TAMBIEN,YO TE ESCUCHO,AQUI TE DEJO MI CORREO,(YOGUR_33@HOTMAIL.COM)Y TAMBIEN TENGO UN BLOG,CUANDO PUEDAS TE PASAS POR EL Y VERAS LO QUE HEMOS SUFRIDO.UN BEZAZO MUY FUERTE Y ANIMO,PORQUE NO PODEMOS DECAER.

En mi familia hay autismo y mucho más dijo...

No existe la inclusión educativa en los institutos. NO EXISTE, NI SE CONSIDERA UNA PRIORIDAD. En la adolescencia lo poco que se había conseguido con mucho esfuerzo en primaria, se destruye. Los chicos, incluso los más implicados y sensibles, huyen directamente de los alumnos con diversidad. Juntarse con el diferente te convierte en diferente y te excluye también a tí. Y esto es así desde siempre. Se asume como una realidad imposible de cambiar. Los raritos acaban con suerte junto a otros raritos en una esquita del instituto, intentando pasar desapercibidos para que nadie les increpe, insulte o abuse de ellos. Eso en el mejor de los casos. En ocasiones son objeto de burla, se les graba y se cuelga en internet mofándose de ellos. En la adolescencia se acabó la inclusión si es que alguna vez la hubo, y por eso como madre tiemblo pensando en el instituto. Y como madre entiendo tu disgusto y tu angustia. Y me solidarizo con una madre que siente que se desprecia a su hijo que es maravilloso sólo por ser diferente. En estos momentos la ayuda psicológica a Alex es básica, y buscar un grupo de apoyo emocional para él también, porque corre el riesgo de quedarse solo y caer en una depresión como tantos otros. Puede que la adolescencia sea un momento de "excepción" y en el futuro esos compañeros que hoy están abducidos por las hormonas y el pertenecer al grupo adolescente y no ser rechazados por él, cuando crezcan un poco recuperen su sentido inclusivo y adquieran personalidad para recuperar la amistad de Alex. Pero mientras tanto tu hijo sufre y mucho. Lo veo todos los días... Son muchos los rostros de la exclusión que me miran sentados en una escalera alejados del grupo cada día a la hora del recreo... o sólos en las aulas sin nadie que se quiera sentar con ellos... Y poco puedo hacer, salvo actividades inclusivas en las que participen todos. Pero siempre perciben que los que se sientan a su lado lo hacen por obligación y con desgana. A fin de cuentas los adolescentes no hacen más que lo que se espera de ellos y para lo que se les ha educado realmente. Excluir y seleccionar.
No había leído esta entrada y me ha recordado que pronto mi hija y yo estaremos igual que tú... de hecho todavía nadie de su clase con 5 años la ha invitado nunca a un cumpleaños, ¿cómo coño lo van a hacer con 15????

Isabel dijo...

Hola Tesoro, que entrada más triste, y dura. Que un chico quiera celebrar su cumple con los que él considera amigos,y éstos no le coja ni la invitación, se le tiene que venir el mundo encima.
Deseo de corazón que Alex pase un feliz día. Te mando un fuertisimo abrazo. Besos

Mamá descubre su mundo dijo...

Hola. Soy mamá de un nene de 2 años y medio que no tiene ninguna diversidad ¿o si?(es que consideros que todos los seres humanos somos diversos y que no hay discapacitados si no gente incapacitada para comprender todo lo que le rodea, refiriendome a los que se denominan "normales"). Siento mucho que tantas personas, entre ellas tu hijo, tengan que sufrir el rechazo. Sé que no es lo mismo pero a mi se me encoge el corazón cuando mi nene se acerca a otros y les dice hola y automáticamente es ignorado. Además vivo con el alma en vilo pensando cuando va a sufrir su primera experiencia racista (es mulato)y no soporto ni pensarlo. Cuando en el parque u otro lugar se ha acercado a algún nene con diversidad y me pregunta que le pasa, yo le intento explicar que este niñ@ comprende el mundo de una manera distinta y tiene otro ritmo para comunicarse, que hay que tratarles con mucho cariño y paciencia y que también le gustaría jugar con todos los niñ@s al igual que mi hijo lo necesita.
Creo que ningún niño es cruel sino que no ha sido educado de manera respetuosa ni generosa ni amorosa. Los niños aprenden del ejemplo de sus padres y cuando ves a un niño cometer actos tan poco amorosos se debe comprender que asi lotratan sus padres, sin comprender ni respetar sus necesidades, colocando conceptos erroneos en su alma. Y como vivimos en sociedad estos conceptos nos tocan a todos de una manera negativa o positiva.
Sinceramente, es muy triste vivir esto pero por suerte tu hijo tiene una madre inmensa, grandiosa, valiente, inteligente que le dará lo que necesita. Ánimo y que ese cumple sea genial.

Estela Martín dijo...

Hola compañera, siento mucho tu dolor y el de Ale, te digo que lo siento pero en realidad lo comparto porque lo vivo con Víctor, mientras que su hermana tiene una intensa vida social, llena de amistades que algunas las mantiene desde la guardería, Víctor está solo, nadie le llama para un cumple, ni para nada. Todo sería más fácil para él si fuera menos sociable. Estoy intentando hacerle comprender su situación, aunque Sonia me dice que "soy perra" cuando me escucha decirle que "no tiene amigos", pero pienso que cuánto antes se haga consciente menos va a sufrir, es muy doloroso, pero también lo es buscar la amistad y encontrar el rechazo.
Podemos pelear por sus derechos pero no podemos obligar a nadie a que nos quieran, no hay otra.
Un abrazo y un beso para Ale y para ti.

Bettina dijo...

Hola Carmen...que dificil...como siento el dolor de Ale y el tuyo. Fuerza, no te dejes vencer...yo si fuera vos a lo mejor le haria algo diferente para tratar de tentarlos a que vayan...y si no planear una buena fiesta con los que si acudan...eso se pasara de boca en boca y la proxima quiza lo piensen dos veces antes de no agarrar la invitacion...no se, solo se me ocurre eso. Un beso grande a Ale y un abrazo fuerte para vos

Ana Pastor dijo...

Que triste lo que cuentas, mis hijos son todavia muy pequeños pero me temo que lo que le ha sucedido a Alex será una realidad con Ander y debo ir preparandome.
ánimo

CORAL dijo...

Hola guapa,intenta no desanimarte. Sé que es muy duro,pero no te vengas abajo.
No sé si ya ha sido el cumple de Ale, pero si no yo en tu lugar intentaría confirmar los que piensan asistir, con la excusa de los preparativos, Si hay un nºsuficiente para montar una fiesta, hazlo.Vamos, suficiente pueden ser cuatro o cinco.Si no lo hay, organizale un día estupendo en compañía de gente que lo quiera de verdad.
Un beso fuerte.
Coral

Towanda dijo...

Gracias a todas por vuestros apoyos y ánimos, y gracias en especial a Ale mi hijo que me enseña a vivir de una forma diferente.
Besos y abrazos.